Afirma López Obrador que es un fracaso absoluto el plan de combate a la inseguridad y violencia de Calderón

Afirma López Obrador que es un fracaso absoluto el plan de combate a la inseguridad y violencia de Calderón
Tampico, Tamaulipas
Sábado 13 de marzo de 2010



* Ni con un policía en cada esquina podrá atacarse ambos flagelos, si no hay trabajo, bienestar, ni educación y oportunidades de desarrollo para los jóvenes, asegura

* La paz social, la tranquilidad y la seguridad pública son fruto de la justicia, aclaró el presidente legítimo de México.

Desde esta entidad asolada por la delincuencia organizada, Andrés Manuel López Obrador aseguró que representa un grave error del gobierno usurpador de Felipe Calderón la estrategia de enfrentar los problemas de violencia e inseguridad sólo con medidas coercitivas, amenazas de mano dura, cárceles, policías, soldados y leyes más severas.

Ni con un policía en cada esquina podrá atacarse ambos flagelos, si no hay trabajo, bienestar, ni educación y oportunidades de desarrollo para los jóvenes. La paz social, la tranquilidad y la seguridad pública son fruto de la justicia, aclaró el presidente legítimo de México.

Afirmó que el plan de combate a la inseguridad y violencia de Calderón ha fallado. “¡Claro que es un fracaso absoluto, total!” y como prueba citó los más de 18 mil asesinatos a manos del crimen organizado en tres años de administración del gobierno espurio.

En lugar de modificar la política económica neoliberal, para garantizar oportunidades de empleo, de bienestar y de estudio para los jóvenes, “¿cómo responde Calderón ante la inseguridad? Con soldados, con amenazas de mano dura”, puntualizó.

En entrevista que concedió antes de una reunión de evaluación con integrantes de los Comités Municipales del Gobierno Legítimo de México del sur de la entidad, explicó que Calderón se colocó, cuando usurpó el cargo, un uniforme militar, cuya camisola le quedaba grande y le hacía parecer al “comandante Borolas”, y le “pegó un garrotazo a lo tonto al avispero y él fue quien nos metió en esta inseguridad que está desgraciando a todos”.

López Obrador hizo énfasis en atender las causas que originaron la inseguridad, como la falta de bienestar y de empleo. ¡Cómo no va a haber tanta inseguridad y violencia si no hay crecimiento, empleo ni oportunidades de estudio y de trabajo para los jóvenes!”, insistió.

Y aclaró que los únicos que tienen posibilidad de trabajo son aquellos jóvenes que quieren ocuparse como policías y soldados, porque todo el presupuesto público se ha destinado al rubro de la seguridad, sin embargo ha decrecido al mismo tiempo la inversión destinada a la educación y al desarrollo social.

En los últimos 27 años de régimen neoliberal “no hay políticas para generar empleos y la manera más humana, eficaz y barata para enfrentar el flagelo de la delincuencia, pasa por combatir la pobreza y garantizar condiciones de bienestar y oportunidades de trabajo”, añadió.

Con base en los recorridos que realiza por la geografía nacional, subrayó que en México impera una política de pillaje y de sometimiento, que arroja beneficios a un grupo compacto, a una minoría rapaz, a la mafia de la política, que cuenta con aproximadamente 30 integrantes.

El presidente legítimo de los mexicanos destacó que “la banda más peligrosa, la que ha causado mayor daño al país es la mafia de la política y siempre que se habla de mafia se piensa en las asociaciones delictivas, pero nunca se habla de los delincuentes de cuello blanco, que ni siquiera pierden su respetabilidad, no se les toca cuando se han dedicado precisamente a saquear al país. ¡Ya chole!, como dicen los jóvenes”, exclamó.

En ese contexto mencionó que Calderón Hinojosa “da hasta pena ajena, porque aceptó el papel de títere, pero ya lo hicieron a un lado y se convirtió en deporte nacional criticarlo, y hasta ahora lo hacen aquellos que hace poco le quemaban incienso. Ahora cuestionan al presidente pelele y lo culpan de todos los males nacionales”.

Sin embargo, precisó posteriormente en una segunda entrevista que concedió a los reporteros a su llegada a Ciudad Valles, San Luis Potosí, los medios de comunicación no tocan ni con el pétalo de una rosa a los jefes de Calderón, a los miembros de la mafia de la política, entre quienes mencionó a Roberto Hernández, Carlos Salinas y Claudio X. González, porque también son propietarios de los principales canales de televisión, estaciones de radio y periódicos.

La oligarquía –continuó— inició una operación de recambio con el PRI y el gobernador mexiquense Enrique Peña Nieto al frente. Salinas es el jefe de campaña y Televisa es la encargada del área de propaganda, en una especie de telenovela, con el siguiente reparto: La Gaviota, La Paloma, Lucerito y ese Copetón irresponsable.

En las reuniones de evaluación de Tampico y Valles, López Obrador puntualizó que la llamada sociedad política está podrida y que los responsables de la decadencia nacional forman parte de la mafia del poder, que ahora coordinados por Salinas.

Expuso que la inseguridad que se padece en todos los rincones del país es fruto de la falta de crecimiento económico, empleos y atención a los jóvenes en los últimos 27 años. “La política económica sólo ha funcionado para un grupo que se ha hecho inmensamente rico a costillas de la mayoría de la gente”.

En cambio, agregó, “al mexicano lo tienen en la sobrevivencia, hay un régimen opresor en México y la gente ha tenido que abandonar sus pueblos para irse a buscar la vida a las ciudades fronterizas”

Con relación a las alianzas electorales entre el PRD, PT y Convergencia con la derecha panista o priista, López Obrador reiteró su rechazo a cualquier tipo de pacto con los partidos responsables de los aumentos a impuestos y a los precios de las gasolinas, el diesel, el gas y la energía eléctrica.

Al respecto recordó que el gobernador tamaulipeco, Eugenio Hernández Flores, a quien tachó de mediocre y ladrón, contribuyó en el fraude electoral de 2006 para imponer a Calderón en la Presidencia de la República.

Ahora que los priistas y panistas se acusan mutuamente de haber roto un pacto político para aumentar impuestos a cambio de no realizar alianzas electorales en el estado de México, López Obrador los llamó a reparar el daño que causaron al pueblo de México y a derogar la Ley de Ingresos, en particular los incrementos a los impuestos y los precios de los combustibles.

“El fondo es ese, lo que provocó todo el diferendo, es que se pusieron de acuerdo para concretar los aumentos, pero al ciudadano lo que le interesa es que bajen los precios de las gasolinas y eso deberían acordar los priistas y panistas. Lo demás es intrascendente, son cortinas de humo”, estimó.

En el mensaje que dirigió a los representantes del Gobierno Legítimo en Tampico y Valles, López Obrador destacó que “sin un verdadero cambio las cosas no van a mejorar y la conclusión es que sólo el pueblo puede salvar al pueblo, y sólo el pueblo organizar puede salvar a la Nación”.

También llamó a los representantes a continuar con el proceso de entrega casa por casa del periódico Regeneración, inscribir a un mayor número de integrantes del Gobierno Legítimo y extender a cada colonia, barrio y unidad los comités municipales.

Para mañana, López Obrador se reunirá con miembros de los comités municipales en San Juan del Río, Querétaro, e Izúcar de Matamoros, Puebla.

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